El estrés es algo que nos afecta a todos en algún momento de la vida. Problemas personales, preocupaciones por culpa del trabajo o un simple atasco en la carretera pueden desembocar en momentos de mayor ansiedad que acaben por afectar a nuestra salud.
Son muchos los puntos de nuestro organismo que pueden verse perjudicados a causa del estrés, y uno de ellos es la vista. Aquí vamos a explicarte cuáles son esos problemas de visión que pueden aparecer cuando estás estresado y qué puedes hacer para solucionarlos.

Temblores en los ojos

Los temblores en los ojos aparecen en las épocas de mayor estrés, y pueden resultar preocupantes para los que los padecen. En realidad, suele ser un problema transitorio y no presenta ningún problema grave, más que la pequeña molestia mientras suceden.
Aunque pueda dar la sensación de que tiemblan los ojos, lo que tiembla es el músculo de Müller, un pequeño músculo cuya función es elevar el párpado. De hecho, el estrés y los nervios no son los únicos causantes de esta molestia, sino que también puede aparecer a causa de determinados hábitos, como el tabaco, la cafeína o la falta de sueño.
En general, el temblor en los párpados causado por el estrés suele desaparecer al cabo de un tiempo, pero, si persiste, lo mejor es acudir a una consulta en la que puedan determinar si está relacionado con alguna otra patología más seria.

Inflamación ocular

La inflamación ocular es otra de las consecuencias más habituales del estrés sobre los ojos. Esta inflamación está relacionada con la maculopatía serosa, una patología que se manifiesta a través de la inflamación de la parte central de la retina. Esto puede llevar a una pérdida en la percepción de los detalles, colores o, incluso, en la capacidad de leer.
La maculopatía serosa también puede ocasionar visión borrosa o, en los casos más extremos, una pérdida de visión. Aunque en estos últimos supuestos pueda parecer algo alarmante, también suele ser algo temporal, y la vista se vuelve a recuperar tras unos periodos de descanso y una reducción del estrés.

Del mismo modo que con los temblores en los ojos, si la inflamación ocular y la pérdida de visión se alargan, es recomendable consultar a un especialista para que descarte problemas más graves.

¿Cómo se pueden evitar los problemas de la vista causados por el estrés?

Aunque a veces pueda parecer complicado, hay maneras de reducir la incidencia del estrés en la vista. De hecho, lo más eficaz es cambiar determinados hábitos y optar por un estilo de vida más relajado, para que el estrés aparezca lo menos posible y se reduzca su incidencia en la vista y en otros aspectos de nuestra salud.
Pero, si notas alguno de estos problemas en tus ojos y crees que están relacionados con el estrés, lo primero que debes hacer es descansar la vista y relajarte. Los hábitos de vida modernos, en los que predominan las pantallas de ordenador, móviles y televisión, suelen incidir en estos problemas y más aún cuando se lleva un estilo de vida sedentario y protagonizado por largas jornadas laborales y falta de tiempo para desconectar.

Si consigues reducir tus momentos de estrés, tu vista lo agradecerá, así como tu salud en general.

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