Es fundamental que los consumidores adquieran gafas de sol que cumplan con la normativa de la UE y lleven el marcado CE, para garantizar la protección de sus ojos y visión ante los riesgos asociados a la exposición solar sin protección adecuada con los filtros UV necesarios. El uso responsable de gafas de sol ayudará a preservar la salud ocular y a disfrutar de una visión clara y protegida durante los días soleados.
En la Unión Europea, las gafas de sol están reguladas por estrictas normativas para garantizar la protección adecuada de los ojos y la visión de los consumidores. Estos requisitos se aplican a todas las gafas de sol vendidas en los países miembros de la UE, ya sean fabricadas en la región o importadas.
Normativa sobre gafas de sol en la Unión Europea
Las gafas de sol deben adherirse a la regulación europea EN ISO 12312-1: 2022, que especifica los estándares de calidad y seguridad para las gafas de sol de uso común, diseñadas para brindar protección contra los efectos de la radiación solar. Esta norma garantiza que las gafas de sol ofrecen una protección adecuada contra la radiación ultravioleta y cumplen con los estándares de calidad necesarios. Además, establece los requisitos para la información que debe proporcionarse al usuario, como la categoría del filtro solar y las advertencias de uso.
Entre los requisitos que recoge esta normativa cabe mencionar:
- Protección UV: Las gafas de sol deben cumplir con los estándares de protección contra la radiación ultravioleta, deben ofrecer una protección adecuada contra los rayos UVA y UVB, bloqueando al menos el 95% de los rayos UV.
- Transmisión luminosa: La cantidad de luz que pasa a través de las lentes es crucial; es necesario que esta cantidad sea la adecuada para prevenir el deslumbramiento y asegurar una visión nítida. La norma establece límites específicos para la transmisión luminosa en diferentes categorías de filtro solar.
- Resistencia al impacto: La norma establece requisitos de resistencia al impacto para diferentes tipos de gafas de sol. Las gafas de sol deben ser lo suficientemente resistentes para resistir impactos y proteger los ojos de posibles lesiones.
- Calidad óptica: Los lentes deben ofrecer una visión nítida y sin deformaciones, sin influir en la apreciación de los colores. Los estándares establecen criterios de calidad óptica para asegurar una visión satisfactoria.
- Información del Fabricante: El fabricante o el importador deben proporcionar información detallada sobre las características de las gafas, incluyendo el nivel de protección U, categoría de filtro de color y uso para el que estén indicadas.
- Ausencia de Sustancias Peligrosas: Las gafas de sol no deben contener sustancias peligrosas que puedan ser perjudiciales para la salud del usuario.
- Información al usuario: Las gafas de sol deben incluir instrucciones claras y legibles incluyendo la categoría del filtro solar, las advertencias de uso y las instrucciones de limpieza y mantenimiento.
- Marcado CE: Todos los lentes de sol vendidos en la Unión Europea deben llevar la marca CE, que señala su conformidad con los estándares de seguridad establecidos en los reglamentos UE 2016/425 y UE 2016/425 sobre equipos de protección personal. Además, deben haber pasado las pruebas de conformidad requeridas. Las gafas de sol se consideran como Equipos de Protección Personal (EPP) porque su principal objetivo es resguardar los ojos del usuario de los daños causados por la radiación ultravioleta (UV) y otros peligros relacionados con la exposición al sol. Por lo tanto, deben cumplir con los requisitos especificados en este reglamento concerniente a los procedimientos de fabricación, comercialización y uso de los EPP.
Riesgos de utilizar gafas de sol que no cumplen la normativa
El uso de gafas de sol que no cumplan con la normativa de la UE conlleva diversos riesgos para la vista y los ojos de los usuarios:
- Exposición a Radiación UV: Las gafas de sol no homologadas podrían no ofrecer la protección adecuada contra los rayos UV, lo que aumenta el riesgo de daños oculares como queratitis, conjuntivitis y, a largo plazo, cataratas, degeneración macular o pterigión.
- Visión Distorsionada: Gafas de baja calidad o sin cumplir los estándares ópticos pueden provocar visión distorsionada, fatiga visual y dolores de cabeza.
- Rotura o Daño: Las gafas no resistentes pueden romperse fácilmente en caso de accidente o impacto, causando daños en los ojos o la cara.
- Alergias y Reacciones Cutáneas: Gafas de sol fabricadas con materiales de baja calidad o que contienen sustancias tóxicas pueden provocar alergias y reacciones cutáneas en el área facial.
- Falsa Sensación de Seguridad: Utilizar gafas de sol no certificadas puede crear una ilusión falsa de seguridad, lo que podría resultar en una exposición prolongada y perjudicial a la radiación solar. La percepción de oscuridad proporcionada por las gafas de sol puede provocar una dilatación de la pupila, y si estas gafas no cuentan con la protección adecuada, permiten que los rayos UV ingresen en mayor cantidad a nuestros ojos. Esto lo hace incluso más peligroso que no utilizar gafas de sol, ya que en este último caso, nuestra pupila se contrae en respuesta al exceso de luz, disminuyendo la cantidad de luz UV que llega a nuestros ojos.
Para garantizar que las gafas de sol que adquieras cumplan con todos los requisitos estipulados por la Unión Europea y proteger la salud de tus ojos, lo mejor es comprar gafas de sol en sitios de confianza, como las ópticas de Afflelou, donde disponemos de una amplia gama de modelos para que elijas la que mejor se adapta a ti y tu tipo de rostro. Las gafas de sol homologadas son consideradas productos sanitarios, por lo que la orientación de profesionales de la visión en un establecimiento óptico es fundamental para tomar la decisión adecuada.
