La “operación salida” ya ha comenzado. Para este verano 2014 se prevén 79 millones de desplazamientos sólo entre julio y agosto. Por ello, la DGT nos hace una serie de recomendaciones todos los años para mejorar la seguridad en las carreteras.
Uno de estos consejos es hacer la puesta a punto del coche antes de salir de vacaciones. Pero, ¿qué ocurre con la revisión de la vista?
En España, el anexo IV del Reglamento General de Conductores hace especial mención a los exámenes visuales como parte verdaderamente importante de la exploración física para obtener y prorrogar el permiso de conducir. En él, además se especifica que el examen visual debe incluir pruebas tales como: medida de la agudeza visual mono y binocular (es decir, visión que alcanzamos con cada ojo por separado y con ambos abiertos) tanto de lejos como de cerca (el reglamento establece que el límite inferior de agudeza visual debe ser 0.5 para conseguir/prorrogar el permiso de conducir), campo visual, motilidad ocular, sensibilidad al contraste y deterioro progresivo de las capacidades visuales.
Por tanto, el buen estado de nuestra visión es lo más importante para poder preservar nuestra seguridad y la de los que nos rodean.
¿Qué debo tener en cuenta?
Como hemos visto, para una conducción efectiva no sólo es importante tener una buena agudeza visual, puesto que, para “ver bien”, hay otros factores que influye de manera significativa: el campo de visión que tengamos, la motilidad de nuestros músculos oculares y la sensibilidad al contraste.
Ésta última es la que nos permite distinguir los objetos sobre un determinado fondo (imaginemos la diferencia entre un gato negro sobre la nieve – contraste alto- y un gato blanco sobre la nieve- contraste bajo) y puede verse alterada por una graduación mal corregida, ambliopía, cataratas, glaucoma, degeneración macular asociada a la edad y otras patologías que afecten a la retina.
Además, otros factores que provocan disminución de la sensibilidad al contraste y, por tanto, disminución de las capacidades visuales a la hora de conducir, son situaciones como el amanecer o el atardecer, los reflejos del sol en el asfalto, en el capó de nuestro coche o en el de la carrocería de los otros, e incluso las luces de los coches por la noche.
¿Cómo puedo evitar la disminución de visibilidad?
A todos los conductores, especialmente en estas épocas de muchos desplazamientos, os recomendamos que añadáis a vuestra lista de tareas pre-vacaciones la revisión de vuestra visión.
Además, en la mayoría de las ocasiones, no es suficiente el uso de gafas de sol normales para evitar esos incómodos deslumbramientos y, la mejor opción en esto casos es el uso de gafas de sol polarizadas. Además, para los casos de conducción nocturna, existen también unos filtros que nos ayudan a mejorar esa sensibilidad al contraste.
Desde Alain Afflelou os invitamos a pasar por nuestras ópticas a realizar un examen visual completo, donde además nuestros especialistas os asesorarán acerca de la mejor opción para que tengáis el viaje más agradable y disfrutéis al máximo de vuestras vacaciones.
¡Feliz verano!
