Mi bitácora: 12 abril, de Madrid a Tánger

13 de abril de 2019

12 de abril – Madrid – Tarifa – Tánger

Por fin llegó el día. Vimos despertar las calles, desperezándose poco a poco sin sospechar que un grupo de ópticas aventureras se había reunido para vivir la mejor aventura solidaria de su vida…  Permitidme esta licencia literaria, pero es que a las 5 de la mañana, Madrid, la capital del ruido, gozaba de un silencio que rara vez se disfruta en sus calles. Y lo más irónico era que nosotras llevábamos despiertas mucho más tiempo que la ciudad…

Los nervios – decía Ana – hacen que vivamos en un perpetuo insomnio durante estas últimas semanas”. Y todas asentimos sin dudar. Son muchas las expectativas e ilusiones puestas en este viaje que ya ha empezado. ¡Cómo no íbamos a estar nerviosas con lo que nos espera!

Y, nos fuimos hacia Tarifa… Eli, conducía a buen ritmo para llegar a mediodía, pero siempre con precaución y nosotras escuchábamos con atención todas las anécdotas que ella nos iba contando sobre las vivencias del año pasado. Algunas historias eran desternillantes, otras emocionantes y algunas tristes. Pero ninguna te dejaba indiferente…  Realmente, nuestra repetidora está sirviéndonos mucho para mantener bien alta la motivación. Nos hace vivir lo que ella vivió, con toda esa energía que le caracteriza. Eli es todo vitalidad. 

Y al fin llegamos a Tarifa, con el tiempo apurado conseguimos alcanzar la caravana de Hyundai, aunque eso sí, comimos demasiado rápido y nos perdimos unas raciones de pescaíto frito en el bonito puerto de Tarifa. Tengo que admitir que no me importó mucho porque la excitación me había quitado algo el hambre. 

Ya en el ferry, el cansancio empezó a hacer mella, y descansamos durante el recorrido. Nos vino bien porque nos dio fuerzas para afrontar la mala noticia que sucedió después. Al pasar la aduana en Tánger las autoridades locales nos pusieron muchas pegas y parte del equipo se tuvo que quedar requisado.

Cris y Blanca intentaron dar explicaciones, pero estas no sirvieron mucho… Lo hecho, hecho estaba y parte del equipo requisado también…

Sin embargo, no nos preocupa. Como ópticas aventureras nos motivan las dificultades y la capacidad de salir de ellas airosas. Superaremos cualquier obstáculo que surja.

En los próximos días lo veréis y lo leeréis.

Firmado: Una Óptica Aventurera